CONSUMO

YPF todavía puede subir 15 por ciento la nafta en Capital Federal

Desde el último fin de semana, las petroleras están informando a las estaciones de servicio los precios tope para los combustibles que rigen desde el 9 de abril y hasta el 9 de octubre. Considerando los máximos establecidos para la región 6 que incluye la provincia y la Ciudad de Buenos Aires, los valores al público en Capital Federal todavía pueden tener aumentos del 13% al 15% en los surtidores de YPF y del 5% al 11,8% en los de Shell.

Este incremento que las empresas pueden aplicar se debe a que en los últimos años los precios de los combustibles en Capital fueron los más baratos del país, debido a la incidencia de esas cotizaciones en los índices del INDEC , a la repercusión mediática que tiene todo lo que sucede en Buenos Aires y marginalmente a los menores costos logísticos y de transporte en el área.

Según datos obtenidos por este diario, los precios tope en la región 6 son $ 7,999 para la nafta súper, $ 8,799 para la nafta premium, $ 7,349 para el diésel 500 y $ 8,498 para el diésel premium. Salvo en el caso del diésel 500, estos números coinciden con los que aparecieron el lunes en el sitio surtidores.com (según esa publicación el tope para ese producto es de $ 7,390).

Los valores máximos fueron comparados con los vigentes ayer en tres estaciones de Capital: la YPF ubicada en Montes de Oca y Martín García, la Shell de Paseo Colón e Independencia y la Esso de Chacabuco al 700. En el caso de YPF, los precios de los surtidores están alineados con los de la empresa porque el estacionero recibe el producto en consignación y está obligado a aplicar los valores oficiales de la compañía. En las estaciones de Shell y Esso, por el contrario, puede suceder que haya alguna mínima diferencia entre las estaciones de una misma red, porque el estacionero compra el producto, lo paga por adelantado y es libre para aplicar el margen propio de ganancia.

De la comparación surge que YPF es la que todavía tiene más precio para tomar, mientras Esso -controlada por Axion de Bridas Corp. desde el año pasado- es la que más cerca está ya de los topes. YPF puede subir el 15,4% el litro de nafta súper, el 14,5% la premium, el 15,7% el diésel 500 y el 13,6% el eurodiésel. Curiosamente, Shell, siempre señalada por tener los precios más altos, todavía puede subir en Capital más del 11% en la nafta súper y el diésel 500, un 5,3% la nafta premium y un 7,9% el diésel de mayor calidad.

Considerando los precios tope publicados por surtidores.com para las 6 regiones del país, se nota además que la nafta premium más cara a $ 9,254 es la que se paga en la región pampeana, que incluye Córdoba, Santa Fe y La Pampa. La región nordeste (Formosa, Chaco, Misiones, Corrientes y Entre Ríos) es la que exhibe los valores más altos para la nafta súper ($ 8,499) y para el eurodiésel ($ 8,980). El noroeste (Jujuy, Salta, La Rioja, Tucumán, Catamarca y Santiago del Estero) es la zona con el diésel 500 más caro, a $ 7,999.

Esta peculiar regulación de precios que surgió tras la Resolución 35 de la Secretaría de Comercio Interior, conocida el 10 de abril, significó hasta ahora aumentos más fuertes (cercanos o superiores al 10%) que los que habitualmente aplican las petroleras (del 3% al 5%). Además, sólo parcialmente se trata del traslado al público de un incremento en el valor del petróleo o en otros costos de la refinación.

No hay datos que permitan vincular directamente la Resolución 35 con el interés del Gobierno por mejorar la caja de YPF y atenuar las consecuencias que tuvo el incendio en la refinería La Plata de esa petrolera. Pero sin duda, la norma de Guillermo Moreno beneficia a la empresa reestatizada en lo que se refiere a sus márgenes de ganancia: le permite emparejar precios con las competidoras, con lo cual puede llegar a perder algún punto en su participación en el mercado, y con eso aliviar un poco la necesidad de importar a pérdida.

Fuente: Ámbito.com