El FMI postergó su viaje a Argentina y el Gobierno tiene más tiempo para juntar dólares
El Fondo Monetario Internacional ( FMI) decidió postergar para los primeros días de julio su visita a Argentina, que estaba prevista para el 13 de junio. El objetivo del viaje es revisar si el Gobierno está cumpliendo con los compromisos que asumió en el nuevo acuerdo firmado en abril, por USD 20.000 millones. Este cambio de fecha le da al Gobierno más tiempo para reunir los dólares necesarios y evitar posibles sanciones del organismo.
Una de las principales metas que Argentina debe cumplir en este acuerdo es aumentar sus reservas de dólares. Por eso la iniciativa de “sacar los dólares del colchón” para ingresarlos en el sistema bancario formal.
El país se comprometió a pasar de un nivel de reservas muy bajo (unos USD 4.900 millones negativos) a una situación menos crítica: apenas USD 500 millones en rojo. Necesita sumar unos USD 4.000 millones antes de que llegue la misión del FMI.
Desde hace algunas semanas, el Banco Central dejó de comprar dólares en el mercado para no provocar una suba del tipo de cambio. Esta decisión forma parte del plan del Gobierno para mantener la inflación en baja, pero al mismo tiempo dificulta la tarea de sumar reservas. Hoy, las reservas totales están en unos USD 37.800 millones, USD 1.500 millones menos que a fines de abril.
El Gobierno buscó alternativas. Una de ellas fue emitir un bono en pesos que pueden comprar inversores extranjeros pagando en dólares. Así logró ingresar USD 1.000 millones sin intervenir en el mercado cambiario. También negocia un préstamo (conocido como REPO) con bancos internacionales para obtener entre USD 2.000 y 3.000 millones más.
El presidente Javier Milei afirmó que la meta de reservas “ya está cumplida” y que no representa un problema para el país. Según él, con el bono emitido, el préstamo de los bancos y la ayuda que llegará del propio FMI, el Gobierno tendrá los dólares que necesita. Además, sostuvo que en un sistema de tipo de cambio libre, como el actual, no es tan importante acumular reservas.
El nuevo acuerdo con el FMI también incluye otras metas, como reducir el gasto público y controlar la emisión de dinero. En algunos puntos, el Gobierno está cerca de cumplir lo pactado, pero en otros (como la acumulación de reservas) todavía hay dudas sobre si alcanzará los objetivos en los plazos establecidos.
El acuerdo firmado en 2025 establece también metas fiscales y monetarias, orientadas a reducir la inflación y ordenar las cuentas públicas. Algunas de estas metas están próximas a cumplirse, como la reducción del déficit primario. Otras metas pactadas, como el fortalecimiento de reservas, están bajo revisión y sujetas al resultado de las próximas negociaciones con el FMI.
Este nuevo préstamo del FMI está estrechamente vinculado a la deuda anterior, tomada en 2018 durante el gobierno de Mauricio Macri, cuando se firmó un crédito récord por USD 57.000 millones. El Fondo tuvo que cambiar su reglamento para poder transferir semejante suma de dinero. De ese total, se desembolsaron USD 44.000 millones. Esa deuda aún pesa sobre la economía argentina y condiciona los acuerdos actuales, ya que buena parte de los pagos que se deben hacer corresponden a ese préstamo.
Fuente: Diario BAE