La toma del banco BERSA por Alfredo de Angeli es para el Gobierno "Una provocación"

El gobernador de Entre Ríos, Sergio Urribarri, utilizó las mismas palabras que el ministro del Interior Florencio Randazzo para reprochar la actitud del dirigente Alfredo De Angeli frente a la toma del Nuevo Banco de Entre Ríos, y acusó al líder entrerriano de querer “dinamitar las columnas del diálogo” que esta tarde retomará el gobierno nacional con las entidades agropecuarias.

"Espero que recapacite porque hay mucho por recomponer”, continuó Urribarri. “Pero estas actitudes, justo en estos momentos, parece que quisieran dinamitar las columnas del diálogo que han recomenzado el campo y el gobierno y cuando toda la Argentina está deseando que ese diálogo fructifique en paz, y reactivación para los argentinos", dijo el gobernador.

En un comunicado oficial, Urribarri se refirió así a la toma del Nuevo Banco de Entre Ríos que realizó ayer un grupo de productores, liderado por De Angeli, y se sumó así al ministro del Interior, Florencio Randazzo, quien horas antes y utilizando el mismo verbo había dicho respecto de la actitud del dirigente que “es una provocación y dinamita el diálogo”.

La protesta de los productores entrerrianos, enrolados en la Federación Agraria local, estuvo destinada a denunciar al banco de Hasenkamp que pretendería refinanciar los vencimientos con una tasa del interés alrededor del 35% cuando el vigente es del 15.

El mandatario lamentó que "esto ocurra en mi provincia. Y lo lamento porque uno puede comprender algún error de un dirigente, error del que nadie está exento. Pero esto ya es una situación que se viene repitiendo".

En ese sentido, señaló que "De Angeli y sus seguidores entraron la semana pasada a un juzgado para interrumpir un proceso judicial y luego entraron por la fuerza también a un estudio de radio".

"Lo lamento porque De Angeli es un dirigente que ha tomado predicamento y por ello no puede actuar haciendo lo primero que se le venga a la cabeza. Los dirigentes tenemos responsabilidades y hay que respetar ciertos comportamientos que son de rigor en la vida democrática", añadió.

Finalmente, dijo que "ser dirigente se trata de conducir a las personas en momentos complejos. Encabezar una horda no es una acción dirigencial que tenga mérito alguno". (CRÍTICA DE LA ARGENTINA)