BCRA pide a empresas que compensen con deuda el giro de divisas

Como en el peor momento de caída de reservas que obligó a instaurar el cepo cambiario, el Banco Central volvió a la política del “1 a 1” y exige a cada empresa que acerca los papeles para justificar el giro de divisas al exterior que busquen cómo compensarlas para registrar un balance neutro en las cuentas de la entidad monetaria. La decisión comenzó a ser comunicada a los bancos privados para que lo pongan en conocimiento de sus clientes.

La medida rige para cualquier motivo de giro de dividas: pagos de contrataciones, cancelación de deudas o giro de regalias o utilidades y el reclamo del Central es siempre el mismo: consigan el equivalente en divisas, ya sea por exportación nueva (están atentos a los que compran facturas de exportadores) o por la toma de un crédito o la emisión de obligaciones negociables u otro tipo de endeudamiento en el exterior.

También, dicen, sirven para compensar inversiones directas de las casas matrices.

La política del “1a1” la generó el ex secretario de Comercio Interior, Guillermo Moreno, cuando manejaba los permisos de importaciones después conocidos como Djai. En el momento de mayor restricción externa se llegó a negociar con sectores industriales (como el editorial que por épocas no pudo ingresar libros al país) o en forma directa con las empresas importadoras.

La intención del programa era que los importadores ayuden a colocar producción local en el exterior aunque nunca pasó de un sistema de compensaciones por el cual los importadores “compraban” las facturas de exportación de empresas que tenían “saldo favorable” en su cuenta y nunca se generaron nuevas exportaciones.

La diferencia ahora es que no se pide que se exporte sino que se ingresen dólares vía el Banco Central, en una medida también tendiente a combatir el contado con liqui inverso por el cual se compran títulos en el exterior en dólares y se liquidan en el mercado interno en pesos por encima del cambio oficial pero las divisas no pasan por el Central

“Me llamaron del banco para avisarme que había problemas con el pago de una contratación, que la habían frenado en la mesa del Central”, reveló el director de Finanzas de una multi.

La sugerencia de la entidad con la que opera es que hable con la casa matriz para generar un crédito. “Estas restricciones no pueden durar más de dos años y para la multi figura en los balances como un préstamo a tasa de 12/14 por ciento, no puede ser mal negocio”, explicó una fuente.

Desde el sector privado, el gerente de la Cámara de Importadores, Miguel Ponce, sostuvo que “el giro de utilidades es una de las cuestiones a normalizar para avanzar en una inteligente integración al mundo. Luego de Ciadi, Club de París y buitres es lo que falta para recrear ambiente favorable a inversiones”.

Fuente: BAE