El acuerdo por el mercado de futuros del dólar incluirá un bono en pesos a tasa variable
El acuerdo -que comprendió negociaciones en la que participaron los grandes actores del mercado- contempla además, la entrega de un bono en pesos a tasa variable a modo de compensación, para paliar la diferencia que pueda surgir de los contratos.
Tras duros días de tironeos, se negoció, en el caso de las operaciones pactadas en el Mercado Abierto Electrónico (MAE), que los bancos deberán ceder posiciones propias, y recibirán un bono en pesos a cambio de contratos que tengan que pagarle a sus clientes como intermediarios.
En el en otro caso, en el mercado Rofex, al regirse por otras reglas, optó por invocar un cláusula de emergencia que le permitirá cubrir sólo parte de las posiciones con sus clientes, ante una eventual devaluación.
Fuentes bancarias confirmaron a Télam que esta tarde se definió que los bancos recibirían un bono en pesos, a tasa variable Bladar más ciertos puntos básicos a definir, con un vencimiento que podría ser pactado a dos años aproximadamente.
Las negociaciones llevaron días y se iniciaron incluso antes del traspaso de mando que ubicó a Mauricio Macri al frente del Poder Ejecutivo Nacional. La secuela de los contratos de futuro también incluyó una demanda judicial contra el ex presidente del Banco Central Alejandro Vanoli presentada por el actual ministro de Hacienda y Finanzas, Alfonso Prat Gay, cuando aún era diputado nacional.
Luego de la asunción de Macri el pasado 10 de diciembre, el acuerdo comenzó a encaminarse en una reunión realizada en el Ministerio de Hacienda, de la que participaron los bancos nacionales y extranjeros, el titular del Banco Central, Federico Sturzenegger y Prat Gay.
Allí se negoció que los bancos resignarían sus posiciones propias, como un gesto de confianza a las políticas económicas del nuevo gobierno, y que recibirían bonos en pesos, a manera de compensación para pagarle a los clientes que negociaron el dólar futuro.
Una vez que Prat Gay y Sturzenegger negociaron con los bancos, que operan mayormente en el MAE, fueron a dialogar con el Rofex, donde también mantuvieron encuentros con sus directivos.
El Rofex tiene una mecánica de funcionamiento diferente al MAE, que implica entre otras cosas ser garante de las operaciones a futuro. Ese mercado ayer se decidió por invocar una cláusula de emergencia para solucionar la situación. Esto es, en el caso de una devaluación, cubrirá al operador que compró “dólar barato” desde finales de octubre con posiciones hasta junio de 2016, hasta un número determinado de acuerdo a fórmula dada a conocer el lunes.
Además de la situación de “emergencia” invocada se estableció una revalorización (“repricing”, en la jerga) en la posiciones compradas entre el 30 de septiembre y el 27 de octubre, y con vencimiento a junio de 2016.
"La corrección del precio original de la operación, adicionando $1,25 por dólar para aquellas operaciones abiertas entre el 30 de Setiembre de 2015 y el 27 de Octubre de 2015, inclusive", precisó el Rofex.
En el mismo sentido, se dispuso "la corrección del precio original de la operación adicionando $ 1,75 por dólar para aquellas operaciones abiertas a partir del 28 de Octubre de 2015, inclusive".
De esta forma, en el caso de ocurrir una devaluación, el Banco Central -así como el Rofex, como garante en su mercado-, no incurrirá con la totalidad de los costos que se producirían, producto de los contratos a futuro de venta que pactó el Banco Central desde finales de octubre hasta la semana pasada, donde la anterior administración buscaba dar señales de tranquilidad cambiaria con un dólar oficial apenas superior a los 10 pesos para contratos pactados a junio próximo.
La negociaciones no fueron fáciles, ya que en un momento Sturzenegger arrancó las mismas con que “no se van a convalidar” los contratos a futuro involucrados, lo que el mercado podría haber traducido en un “default”.
“No hubo default porque hubo diálogo”, se sinceró un titular de un banco extranjero con gran participación en el mercado local. Producto de ese diálogo, se logró que al menos lo bancos resignen posiciones propias, “sin nada a cambio”, dijo la misma fuente, quien se mostró "optimista" respecto a que el futuro cercano se abrirá una oportunidad en el negocio de financiamiento al Estado, incluso “antes de que el gobierno termine de negociar con los fondos buitre”.
Otra fuente ligada a las conversaciones confirmó a Télam que “la negociación fue sólo una, pese a que algunos bancos estaban más expuestos que otros, todos acordaron resignar posiciones propias”.
Fue luego de ese acuerdo que el Central expresó anoche en un comunicado que “en el contexto de la situación generada en el mercado de dólar-futuro, el Banco Central de la República Argentina (BCRA) requerirá a las entidades financieras la reducción total de su Posición Global Neta en moneda extranjera, que incluye posiciones tanto en el mercado spot como futuro".
Fuente: Télam