FINANZAS
El mercado especula que el depósito que hizo el país es parte de un pacto anti-RUFO
Luego de que el Gobierno anunciara que había depositado en el Bank of New York (BONY) los más de 1.000 millones de dólares necesarios para afrontar el vencimiento del lunes del bono Discount, economistas de la City y operadores del mercado financiero empezaron a tejer sus propias especulaciones respecto del objetivo último de la decisión. Según los especialistas, el pago adelantado y la carta que leyó el ministro de Economía Axel Kicillof pueden ser una forma de presionar a Estados Unidos responsabilizándolo por una eventual decisión de uno de sus jueces que empuje a la Argentina al default, pero también una táctica concertada con los acreedores y el propio Thomas Griesa para entablar una negociación sobre los plazos de pago sin que se active la cláusula RUFO. Se trata del mecanismo que garantiza a los acreedores que aceptaron el canje que no se le pagará más que a ellos a ningún otro acreedor, y que amenaza con hacer tambalear los dos canjes exitosos de 2005 y 2010 en caso de que se el pago se concrete.
La primera especulación sobre un posible paso concertado para pagar sin riesgo de nuevos juicios corrió por cuenta de Martín Rapetti, economista del Centro de Estudios del Estado y la Sociedad (CEDES) y colaborador del exfuncionario radical Roberto Frenkel. “Suponé que Griesa embarga los fondos. El gobierno putea (sic) para la tribuna pero va al juzgado y pide la stay (la cautelar que evitaría el embargo). Griesa y los buitres aceptan. Con la guita embargada y el stay, se negocia un pago a la Repsol post vencimento de la RUFO. El gobierno no negocia voluntariamente, los buitres cobran y la tribuna compra que fue el capital financiero y el imperialismo. ¿No es mala la estrategia, no?”, publicó el docente en su cuenta de twitter @mgrapetti.
El investigador y exjefe de asesores de José Luis Machinea durante el gobierno de la Alianza, Pablo Gerchunoff, abonó la hipótesis de su colega. Y abundó: “Los gobiernos se equivocan más cuando tienen plata, pero pagan más costos políticos por lo que hacen cuandono la tienen”.
Para el director de la consultora Elypsis y ex economista jefe del Banco Central, Eduardo Levy Yeyati, también se trata de una maniobra con un fin que excede el de responsabilizar a Estados Unidos. “Si el gobierno pensara en defoltear, haría un canje de jurisdicción; dejándose embargar sólo eleva el costo de salirse de la negociación”, sostuvo en la misma red social.
Fuente: BAE