Enero cerró con récord de embarques de trigo

El mes de enero registró un récord de embarques de trigo, que sumaron 3,47 millones de toneladas, de acuerdo a la Bolsa de Comercio de Rosario (BCR). Si se añade el mes de diciembre, en conjunto también redondearon una cifra destacable, con un volumen embarcado de 5,5 millones de toneladas. Desde la entidad bursátil estimaron que se arribó a este número gracias a la recuperación del caudal del Río Paraná, que desde mediados de diciembre se elevó un metro.

El destino excluyente de estos buques trigueros fue el sudeste asiático, que de acuerdo a la BCR reemplazó compras habitualmente realizadas a Australia a causa de la fuerte sequía que padece este país. En segundo lugar se encuentra Sudamérica, con Brasil a la cabeza, seguido por África y otros destinos de Asia y Norteamérica.

En el mercado local, la bolsa rosarina detalló que los exportadores se encuentran abastecidos sin mayores inconvenientes, con compras que alcanzaron las 13,9 millones de toneladas y Declaraciones Juradas de Venta al Exterior (Djve) por 12 millones de toneladas. Por su parte, la molinería lleva adquiridas 1,6 millones de toneladas de este cereal, en línea con el promedio de los últimos cinco años para estas fechas, que es de 1,5 millones de toneladas.

A nivel internacional y según estimaron desde la BCR, el trigo ha continuado con ajustes en sus cotizaciones en los mercados de los principales exportadores mundiales. En este escenario, se registraron caídas en los valores por segunda semana consecutiva en Rusia y Australia, tras los precios máximos que se registraron hacia finales del pasado mes de enero y la baja generalizada de los mercados de capitales y commodities, a causa del del brote de coronavirus.

Para la bolsa rosarina, el mercado local continúa perdiendo competitividad respecto al resto de los orígenes de mercadería más importante. En este sentido y si bien en los últimos días el precio del cereal no ha registrado cambios en su cotización, tuvo un incremento importante en su precio FOB desde los primeros días de enero. Pero por un lado, los menores valores esperado de stocks finales de este cultivo correspondientes al ciclo 2019/20, más la sólida demanda externa, hizo posible que Argentina llevara a cabo exportaciones desde el inicio de la campaña comercial, a partir de diciembre.

Un dato a tener en cuenta es que la caída en la producción del trigo en Australia permitió elevar los embarques al sudeste asiático, ante la baja de los saldos exportables de este cereal en Oceanía. Además y una semana de la publicación del próximo Informe Mensual de Oferta y Demanda Mundial del Departamento de Agricultura de Estados unidos (Usda), las expectativas de los operadores indican que las existencias finales de trigo mundiales disminuirán en 600.000 toneladas. Esta caída estaría originada en la mayor demanda a nivel global de trigo.

Fuente: Diario BAE