Grecia debe pagar por cada título de deuda más intereses que Alemania

El diferencial entre el bono griego y el alemán, papel de referencia, alcanzó hoy su máximo histórico después de que comenzaran a circular rumores según los cuales Grecia había rechazado recibir financiación del FMI, algo que desmintió desde Atenas.

Según las informaciones, Grecia no aceptaría créditos del Fondo Monetario Internacional (FMI), sino sólo de los estados europeos, según un despacho de la agencia de noticias DPA.

Además, circularon informes que apuntaban a que Atenas puede pedir a la Unión Europea (UE) modificar los términos del plan de emergencia acordado el mes pasado.

El ministro de Finanzas griego, Giorgos Papakonstantinou, rechazó que se hubiese tomado esa decisión y dijo: "en ningún momento nuestro país emprendió ninguna medida para cambiar las condiciones del reciente acuerdo", aseguró en referencia al plan de emergencia acordado el mes pasado en la eurozona.

La Comisión Europea, por su parte, evitó comentar la noticia.

Ante los rumores, las tasas de interés que el mercado de capitales exigía hoy a los bonos griegos subieron. Atenas debe pagar por cada título de deuda casi un 3,9 por ciento de intereses más que Alemania.

Mañana miércoles, una delegación de expertos del FMI viajará a la capital griega para abordar con el gobierno la puesta en práctica de su plan de austeridad.

El organismo prestamista proveerá "asistencia técnica" sobre los retos fiscales que Atenas afronta este año y los próximos, en respuesta a un pedido del gobierno griego, señaló hoy el FMI en un comunicado.

De acuerdo con otras fuentes, los griegos transfirieron en los últimos tres meses casi 8.000 millones de euros de sus ahorros privados a cuentas en Suiza, Chipre y Reino Unido.

El Ministerio de Finanzas griego evitó hacer comentarios y calificó de "rumores" los informes.

Con el acuerdo para un plan de rescate alcanzado hace apenas dos semanas por los Estados de la eurozona, los índices de riesgo del país se redujeron ligeramente.

El plan de emergencia contempla la concesión de créditos millonarios a Grecia, tanto del FMI como de los países de la zona euro.

Para fines de mayo, Grecia debe refinanciar unos 20.000 millones de euros y a finales de año necesitará en total 55.000 millones de euros.