ECONOMÍA
La importación de maquinaria agrícola crece producto del récord en cosechas
Las importaciones de maquinaria para el sector sumaron u$s622 millones en los primeros ocho meses del año. En igual período del 2009 habían marcado una retracción del 55% respecto del 2008
El aumento en las producciones de maíz y soja de la campaña 2009/2010 incentivó a los productores a comprar más máquinas. Eso se pudo ver en los primeros ocho meses del año, cuando las importaciones aumentaron un 69,6 por ciento.
Así lo consignó un trabajo de la consultora Investigaciones Económicas Sectoriales (IES), donde se detalló que la mejora en el campo se notó en las importaciones de maquinaria, que sumaron en dicho período u$s622 millones. De esta forma el sector recuperó la caída superior al 55% registrada en el 2009 “debido a la crisis agrícola y a los controles a las importaciones”.
En ese sentido, la suba interanual de u$s255 millones de las importaciones se origina por el aumento registrado en los tractores (de todos tipo) del 170%, trilladoras (40,6%), cabezales (48,8%), y en pulverizadoras (46,3 por ciento).
Para Manuel Dorrego, director ejecutivo de la Cámara Argentina de Fabricantes de Maquinaria Agrícola Argentina (Cafma) “la muy buena cosecha alentó a los productores a invertir en máquinas más nuevas ya que éstas permiten un mayor rendimiento para justificar la inversión”.
Dorrego remarcó que los créditos para compra de maquinaria a tasa subsidiada de $270 millones anunciados por el Gobierno “han sido muy positivos ya que han movilizado las compras influyendo sobre la demanda”.
Entre los países de origen de las importaciones, Brasil es el principal, con una participación del 53,3%, lo que marca un incremento fuerte respecto de igual período del 2009, cuando significaban 31% del total. A mucha distancia aparece los Estados Unidos (17,3%) y Alemania (7,5%), en ambos casos con una fuerte caída en su participación respecto del período base de comparación, lo que indicaría que fueron afectadas por la traslación de compras hacia el socio del Mercosur.
Exportaciones. Respecto de las ventas al exterior IES destacó que en valores alcanzaron los u$s196,5 millones con un crecimiento del 17,4% con relación a los u$s167,4 millones exportados en iguales meses del año pasado, superando así la caída del 51% en el total de este último. Esto quiebra la tendencia decreciente y recupera levemente el fuerte sendero ascendente registrado entre el 2006 y el 2008.
El destino de las máquinas tuvo a Venezuela como el principal comprador con el 28,2 por ciento. El segundo lugar lo ocupó Uruguay, con el 18,9%, que desplazó a Brasil al tercer lugar, con el 15,6% en los primeros ocho meses del año. Entre los tres abarcan cerca del 63% del valor total exportado.
Perspectivas. Un trabajo elaborado por el Proyecto Nacional de Eficiencia de Cosecha y Postcosecha de Granos (Precop) del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria (INTA) arrojó que el 2010 cerrará con una recuperación del 30% en las ventas de maquinarias agrícolas en relación con el año pasado.
Esto hace que la industria metalmecánica logre ingresos para este año del orden de los u$s1.350 millones, frente a las de 2009, cuando las ventas fueron de u$s1.090 millones (un 12% menos que en el 2008).
Para el INTA, la salida al mercado externo es otro índice que permite ver el crecimiento. En el 2002 se exportaban unos u$s10 millones hacia diez países y lo hacían un puñado de empresas, pero el año pasado se vendieron máquinas por u$s217 millones, distribuidas en cien empresas, llegando esta vez a treinta y dos países.
Pero en el trabajo se alertó que la reactivación del sector estaría centralizada en la venta de equipos de gran capacidad de trabajo, lo cual muestra una tendencia hacia el cambio de escala productiva con una marcada y preocupante desaparición de la demanda de maquinaria agrícola por parte de los productores medianos a pequeños, situación que debe ser revertida. En todos los rubros analizados por el Precop se observa un crecimiento del tamaño y la potencia de los equipos requeridos con aumento de 10 a 15% de capacidad de trabajo de la maquinaria promedio requerida.
(El Argentino)