Las automotrices retroceden en todo el mundo, menos en Brasil, Argentina, China y Alemania

El rótulo de crisis sigue quedándole justo a buena parte de los países que lideran el consumo mundial de automóviles. España, Estados Unidos, Reino Unido, Chile y México son algunos de los territorios que más sufrieron y sufren el quebranto que exhiben las ventas.

Pero en tanto escenario negativo siempre aparecen uno o dos nombres que hacen a la excepción. Según la consultora Abeceb.com, en este momento de crac los casos opuestos son tres: China, Alemania y el vecino Brasil.

Puntos Importantes

* España, Estados Unidos, Reino Unido, Chile y México son algunos de los territorios que más sufrieron y sufren el quebranto que exhiben las ventas. * Pero en tanto escenario negativo siempre aparecen uno o dos nombres que hacen a la excepción. * Según la consultora Abeceb.com, en este momento de crac los casos opuestos son tres: China, Alemania y el vecino Brasil.

Y en esa serie de ganadores y perdedores también hay lugar para la Argentina. Pero no en la posición de hundimiento irreversible que algunos analistas apocalípticos pronosticaran a fines de 2008. Muy por el contrario, la Argentina muestra una caída intermedia en los niveles de venta, pero con el aliciente de haber desacelerado su declive.

“La fuerte baja en las ventas está aminorándose. En términos de patentamientos hoy se están dando cerca de 2.000 por día. Y ese número es prácticamente el piso. Es cierto que habrá caída porcentuales fuertes porque venimos de un año anterior que fue récord. Pero ya estamos cerca de las 40.000 unidades mensuales”, aseguró a iProfesional.com Maximiliano Scarlan, economista de Abeceb.com y experto en la industria automotriz.

Esta última cifra también resultó avalada por Dante Álvarez, presidente de la Asociación de Concesionarios de Automotores de la República Argentina (ACARA), quien sostuvo que “las ventas evidencian que el mercado se ha estabilizado en un nivel de ventas cercano a 40.000 vehículos por mes, que no está nada mal, teniendo en cuenta el contexto”.

“Si bien la caída en el acumulado de los cinco primeros meses es del 18%, no es un número alarmante ni mucho menos. En Estados Unidos, el retroceso fue del 30% y en Europa, del 40%”, aseguró.

En paralelo, Scarlan coincidió en que “la venta está estabilizándose”, y que a pesar de lo complicado del escenario “se cerrará el año con un total de ventas significativo”. Para analista, el número de transacciones de aquí a diciembre oscilará entre las 470.000 y las 490.000 unidades.

“La caída respecto de 2008 será a lo sumo del 20% al finalizar el año. Se ubicará en niveles apenas por debajo de las 500.000 unidades seguramente. Pero no es un mal indicador. Si hablamos de momentos dramáticos para la industria entonces tenemos que situarnos en años como el 2002, cuando se cerró el año con ventas por 100.00 vehículos”, dijo.

Scarlan explicó, además, que la leve baja que ostenta hasta el momento la venta de automóviles en Brasil (del 0,7% respecto de 2008) también repercutirá de manera positiva en la producción que se desarrolla en la Argentina.

“A diferencia del año pasado, que demandó más del 70% de lo que se fabricaba en el país, hoy Brasil es el destino del 85% de los autos que se exportan desde la Argentina”, sostuvo el especialista.

Y agregó: “Al caer de forma tan leve el mercado del país vecino, entonces el peso de la crisis no se siente para los exportadores locales. De mantenerse las cosas como están, las ventas de la Argentina a Brasil cerrarán el año con una caída a lo sumo del 5 por ciento”.

Mapamundi

Pero ¿qué sucede si se analiza el escenario automotor ya en términos globales? Hasta el momento, las ayudas promovidas por los gobiernos de los principales mercados de consumo han cosechado resultados dispares.

Según Abeceb.com, con estas naciones pueden armarse tres grupos bien diferenciados. El primero, más numeroso y homogéneo, en el que las ventas se desplomaron a razón de dos dígitos y llegan a registrar caídas de no más del 50%, como sucede con Chile.

El segundo, en el que las ventas internas si bien cayeron respecto del primer cuatrimestre de 2008, lo hicieron a tasas mucho menores que en los mercados del primer grupo.

En este pelotón se ubican: Francia, con un declive del 4,8%, la Argentina (baja del 13,1%), e Italia (caída del 16,4 por ciento).

Y, por último, un tercer grupo, conformado por aquellos países en donde las caídas fueron o casi nulas o, caso contrario, directamente se dieron instancias de crecimiento en la demanda respecto del año anterior.

Es en ese grupo donde aparecen los, hasta el momento, único tres beneficiados en esta época de quiebras y depresiones: Brasil, con un descenso de apenas 0,7%, Alemania, que creció 18,4%, y China, con una suba impactante del orden del 24,8 por ciento.

Caso por caso

Ahora bien, ¿a qué recetas apelaron los países que, por decirlo de algún modo, aceleraron hasta dejar atrás la crisis?

En el caso de Brasil, la crisis financiera encontró al país vecino transcurriendo por el mejor año de su historia en lo referente a ventas de automóviles.

Así, y siempre de acuerdo a Abeceb.com, entre enero y mayo de 2009 se comercializaron en Brasil 907.676 autos nuevos, apenas un 0,04% menos que en los primeros cinco meses del año anterior (401 vehículos menos, o sea).

En este resultado influyó un paquete de medidas que el gobierno brasilero puso en vigencia en enero último y que permitió que las ventas internas de vehículos se mantengan casi en los mismos niveles que durante los primeros meses de 2008, época en que la crisis financiera internacional no era siquiera una amenaza visible, explicaron desde la consultora.

En primer lugar, el gobierno de Lula estableció un paquete de asistencia con un presupuesto de u$s4.000 millones. A través de este programa, se impulsó una reducción impositiva en dos gravámenes relacionados con la comercialización de vehículos nuevos:

* Se redujo a la mitad el impuesto que se aplica sobre todos los contratos financieros cuando las personas adquieren cualquier tipo de bien (IOF). El impuesto pasó del 3% al 1,5 por ciento.

* Se aplicó un esquema de reducciones sobre el impuesto a los productos industrializados (IPI), cuya cuantía depende de la motorización del vehículo y que tendrá vigencia hasta el próximo 30 de junio.

Ya en segundo lugar, el paquete de ayuda al sector incluyó la inyección directa de fondos para garantizar que el crédito destinado a la compra de vehículos nuevos no desapareciera de la oferta de los bancos.

Alemania

En el caso de Alemania, en enero entró en vigencia el “Programa de Reactivación Económica”.

Vía ese recurso, que acumuló fondos por 5.000 millones de euros, el Estado alemán comenzó a desembolsar subsidios de hasta 2.500 euros a todo propietario que se decidiese a vender un auto de al menos nueve años para reemplazarlo por otro nuevo que cumpla con la norma Euro4 de emisiones de gas contaminante.

“Alemania buscó dinamizar las ventas apelando a un sesgo relacionado con el cuidado del medioambiente. No se vende cualquier auto, sino uno que cumpla con ciertos parámetros orientados a disminuir la contaminación”, explicó Scarlan a este medio.

Mediante el programa en cuestión la nación europea no sólo sostuvo la demanda sino que además la elevó muy por encima de los parámetros de 2008. En la actualidad, las ventas totales en el mercado alemán se ubican un 18,4% por encima de lo comercializado en el primer tramo del año pasado.

China

Por el lado del gigante asiático, China lanzó en enero de este año los llamados “Plan de Reestructuración de la Industria Automotriz” y “Plan de Estímulos a la Venta de Vehículos Nuevos”.

El primero tuvo y tiene como principal objetivo volver más eficiente la producción automotriz en ese país. Hoy por hoy, China cuenta con más de 80 fabricantes de autos y alrededor de 7.000 proveedores.

La idea es, entonces, concentrar la producción dos o tres fabricantes con capacidad para producir más de 2 millones de unidades por año y en un grupo integrado por otras cinco compañías con plantas para desarrollar 1 millón de autos anuales. Esto no haría más que fortalecer el esquema de fabricación chino.

En simultáneo, el segundo plan estipula el recorte de impuestos sobre las adquisiciones de autos chicos. Y contempla la entrega de subsidios por hasta el 10% del valor total de cualquier vehículo a compradores de zonas rurales.

A la par, el gobierno chino aumentó los subsidios para el desguace de automóviles y anuló las regulaciones que limitaban la compra de vehículos nuevos. ¿El resultado? Un crecimiento respecto de 2008 superior al 24 por ciento.

“China no hace más que seguir creciendo de la manera en que lo venía haciendo. Es una economía que creció de a dos dígitos hasta hace poco tiempo. Y que se caracteriza por contar con una dinámica propia. De ahí que las caídas interanuales, como hasta ahora, se noten mucho menos que en otros países”, concluyó Scarlan(INFOBAE PROFESIONAL)