Se intensificó el conflicto social en Grecia luego de la aprobación de una nueva serie de reformas

El Aeropuerto Internacional de Atenas informó que todos los vuelos desde y hacia Grecia fueron cancelados, luego de que los controladores aéreos iniciaron su huelga a la medianoche.

Los barcos permanecieron en los puertos y todos los trenes dejaron de circular, mientras que los hospitales solo atendieron casos de urgencia.

Por su parte, la unión de empleados de la banca ya había iniciado ayer una huelga de 48 horas.

Las huelgas afectan sobre todo a Atenas y a la norteña ciudad portuaria de Tesalónica, donde se espera que en el transcurso del día miles de personas salgan a las calles a manifestarse contra las nuevas medidas de ajuste aprobadas por el gobierno socialista.

El Parlamento aprobó anoche una legislación de emergencia, con 156 votos a favor y 130 en contra, que establece más recortes salariales, traslados obligatorios de empleados de compañías estatales y una flexibilización de las leyes laborales.

Asimismo, los taxistas tienen previsto sumarse a las huelgas con cuatro horas de cese de actividades, después de que el gobierno decidiera eliminar una recarga de un euro a las tarifas.

Por su parte, los periodistas griegos planear adherirse a la medida con un "apagón informativo" y un paro de 48 horas el viernes y sábado, informó la agencia de noticias DPA.

La ola de huelgas en toda Grecia de los trabajadores de los sectores del transporte público marítimo y terrestre obligó el martes a los griegos a desplazarse en sus coches.

Una nueva medida de fuerza de 24 horas en el transporte público está prevista para mañana.

Toneladas de residuos sin recoger se apilan en la zona metropolitana de Atenas como consecuencia de una huelga de una semana de los trabajadores del principal vertedero, que causó retrasos en la recolección de basura en la región.

Los trabajadores reclaman la renovación de los contratos temporales para unos 100 compañeros.

El gobierno griego comenzó a implementar una serie de reformas económicas para cumplir su compromiso de recortar el gasto público a cambio del plan de rescate por 110.000 millones de euros (150.000 millones de dólares) ofrecido por la Unión Europea (UE), el Banco Central Europeo y el Fondo Monetario Internacional (FMI).

Atenas anunció las nuevas medidas de austeridad después de una reunión, la semana pasada, con dirigentes de alto rango de la UE y el FMI, quienes urgieron al gobierno heleno a acelerar las reformas fiscales.

El Parlamento griego votará el nuevo presupuesto del Estado el 22 de diciembre. El Partido Socialista de Grecia (PASOK) tiene una mayoría de 156 de los 300 escaños parlamentarios.

(Telam)