Privatización eléctrica en marcha: el Gobierno avanza con la venta de Transener
El Gobierno nacional prepara un nuevo paso en su plan de privatizaciones: el Ministerio de Economía se dispone a publicar en el Boletín Oficial el inicio del proceso para desprenderse de su participación en Transener, la principal empresa de transporte eléctrico de alta tensión en la Argentina.
La privatización de Transener representa una operación estratégica en el esquema de reformas impulsado por el oficialismo. No sólo se trata de una empresa rentable, sino de un actor clave en el funcionamiento del sistema energético argentino.
A través de la estatal Energía Argentina S.A. ( Enarsa), el Estado posee de forma indirecta el 26,32% de Transener. Esto se da mediante la tenencia del 50% de las acciones de Citelec, la sociedad controlante de la transportista, que comparte la propiedad con Pampa Energía, la firma fundada por Marcelo Mindlin. Citelec, a su vez, controla el 52,64% de las acciones clase A de Transener.
El valor de mercado actual de Transener ronda los USD 600 millones, por lo que la participación estatal podría venderse por una cifra superior a los USD 150 millones. “El valor de mercado actual está bastante alto, ya que se han recompuesto los ingresos con el aumento de tarifas. Es 10 veces su Ebitda”, explicó un economista con experiencia en el sector citado por La Nación. Y agregó: “Hoy, las empresas argentinas se venden por tres o cuatro veces su Ebitda”.
El decreto publicado el 24 de abril habilitó la privatización total de Enarsa. La primera etapa incluye la venta de su participación en Citelec y convoca a un concurso público nacional e internacional para definir al nuevo comprador. Esta decisión se enmarca en la política de desregulación impulsada por el presidente Javier Milei, que ya concretó la salida del Estado de IMPSA, inició la privatización del Belgrano Cargas y licitó las concesiones de las represas hidroeléctricas del Comahue.
Transener opera y mantiene 15.408 kilómetros de líneas de 500 kilovoltios y 60 estaciones transformadoras, lo que representa el 86% del transporte eléctrico del país. Según datos oficiales, la demanda de electricidad creció 117% entre 2002 y 2024, mientras que la red de transporte se expandió apenas un 54%.
“La saturación del sistema genera mayores costos de mantenimiento. El equipamiento opera con más estrés y es difícil hacer reparaciones en horarios normales. Esto implica trabajar en turnos extraordinarios”, advirtió Pablo Tarca, director general de Transener, durante una audiencia pública celebrada en febrero.
El proceso de venta abre interrogantes sobre el futuro control accionario. Pampa Energía, que ya posee el 50% de Citelec, cuenta con un derecho de preferencia para adquirir la parte en venta. Sin embargo, su eventual avance podría entrar en conflicto con la Ley 24.065, que regula el Régimen de Energía Eléctrica. Su artículo 31 impide que un generador, distribuidor o usuario mayoritario sea propietario o accionista mayoritario de una transportista o su controlante. La norma contempla una excepción: el Poder Ejecutivo puede autorizar la tenencia accionaria si la red es construida exclusivamente para consumo propio.
En el mercado financiero, las acciones de Transener cotizan en la Bolsa de Comercio de Buenos Aires, que concentra el 27,79% del paquete accionario. El papel cerró el martes 23 de julio a ARS 2.340, con un valor bursátil total estimado en USD 821,7 millones. Su recuperación reciente coincidió con el rumor del inminente anuncio oficial. A pesar del repunte, en lo que va de 2025 acumula una baja del 19%.
Además de su participación en Transener, Enarsa controla centrales termoeléctricas, participa en la operación de gasoductos y cumple funciones de intermediación en la compra y venta de energía. Según fuentes oficiales, esos activos también forman parte del programa de desprendimiento.
Fuente: Diario BAE